martes, 24 de abril de 2012

Puta Vida...Pura Vida.

Llegas a cansarme tanto a veces que si pudiera te daba la patada o me la daba a mí misma. Treinta y seis años voy  a cumplir en unos días, treinta y seis, y desde poco antes de los cuatro tengo recuerdos de lo hija de puta que has sido y eres. Y si compartiera la memoria de mis células, recordaría que en el mismo momento de mi fecundación me tuviste que joder, aunque no hace falta memoria viendo los resultados.

¿Tan poco crees que voy a vivir que me tienes que juntar la mierda de tres vidas en estos años? Podría desgranar todo lo que me has hecho tragar en un libro y acabarían juzgándome por genocidio al provocar el mayor suicidio colectivo de la historia. Nunca te sientes satisfecha. No hay suficientes lágrimas para llenar tus ansias de dolor. Perra.

Intentando entenderte, intentando no sentirme humillada, atacada, reducida a polvo me dediqué a investigar tus orígenes desde la primera alga azul hasta el último mono (es decir, nosotros mismos). De ahí sólo conseguí sacar en claro que tú sentido del humor es altamente retorcido, tanto que se pasa de mala broma. Y si algo ya no te hace gracia, cambias las normas a tu antojo, ¿no te han dicho nunca que tú sólo eres producto de un mal experimento galáctico? Zorra.

Como no conseguí nada investigando tu historia, me centré en cómo unos monos con un cráneo más grande te veían. Religiones, filosofías y psicologías después llegué a la conclusión de que somos poco menos que gilipollas tratando de entender a una psicópata bipolar como tú. Tú no actúas siguiendo un patrón de destino, ni te mueve la energía de mi mente (cuanto más amor, más cosas buenas), ni siquiera eres una versión deforme de mi mente enferma. Tú te ríes de estos estúpidos simios en su cara cuando nos ves rezar, cruzar los dedos o simplemente navegar en mundos imaginarios. Puta.

He llegado a la conclusión de que tienes tus propios conejillos de indias donde pruebas todas las perrerías que se te pasan por las ínsulas, simplemente porque te divierte ver los resultados, una especie de perro de Paulov. Sin embargo, guarra, se te olvida que no todos somos iguales, te lo tienes tan creído que olvidas comprobar una serie de variables, como la fortaleza y las putas ganas de seguir viva que tengo. Si no conseguiste hundir mi morro en la mierda hasta asfixiarme desde que tengo uso de razón hasta ahora, olvídate que yo ya no me largo.

Acostúmbrate a ver esta cara que no va a dejar de mirarte de frente, hazte a la idea de que vas a tener que aguantarme mucho tiempo, cabrona, porque pienso cobrarme todo el daño que me has hecho exprimiéndote hasta que me devuelvas la alegría que me robaste...


9 comentarios:

  1. Te ha faltado rubricarlo con un escupitajo en medio de su careto. Un uffffffffffff y a seguir ;)

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    1. Todos los días la escupo a la cara. No se merece otra cosa.

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  2. Escribes en carne viva...es mi primera entrada en tu blog, te aseguro q no la ultima, me has dejado alucinado.. Buen día Luna!

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    1. Gracias por leerme, espero verte por aquí. Buen día!

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  3. Uff, lo leí varias veces y cada vez que lo hago de nuevo me deja los pelos de punta.

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    1. Supongo que es lo que todos queremos decirle alguna vez...

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  4. Uf, desde luego se ve que rencor tienes. Un beso guapisima.

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  5. Se puede decir más alto pero no más claro. Así eres tú, pura energía , fuerza, rabia y coraje. Tus letras no podían reflejar otra cosa y llega tan profundo y preciso como un certero bisturí . Sigue así wapa pero ojalá todo sea más sencillo, quizás de otra forma no serias tú. Muacks

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